Imagina que llegas a casa tras un día agotador bajo el sol, enciendes el aire acondicionado buscando un poco de alivio y… ¡nada! O peor aún, sí funciona, pero al final del mes, el recibo de luz te hace sudar más que el calor de afuera. Esto no tiene por qué suceder así. Si te has preguntado cómo ahorrar energía con aire acondicionado sin sacrificar confort, la clave está en la eficiencia, es decir, en elegir equipos adecuados, darles mantenimiento regular y aprovechar tecnologías inteligentes.

Aunque el efecto es heterogéneo y varía según las condiciones climáticas y los contextos, contar con un sistema de aire acondicionado incrementa el consumo eléctrico del hogar en un 36% en promedio, según un estudio publicado en The Journal of Environmental Economics and Management.

“El problema es que muchos equipos trabajan más de lo necesario, simplemente por falta de mantenimiento, una mala configuración o porque ya están obsoletos, lo que aumenta el riesgo de fallas y dispara el consumo de energía”, señala Enrique Tello, director general de Trane México.  Por eso, adoptar buenas prácticas y aprovechar tecnologías más eficientes es una necesidad para mejorar la eficiencia, controlar el gasto energético y disfrutar del verano sin sobresaltos.

Sencillos trucos para usar el aire acondicionado en casa sin gastar tanta electricidad

Pensando en las necesidades que trae consigo la llegada del verano, el experto de Trane México —marca especializada en la fabricación de sistemas de climatización para crear ambientes confortables, sustentables y energéticamente eficientes en el hogar— comparte una guía práctica para mantener preparado tu equipo, y detalla cómo ahorrar energía con aire acondicionado mediante soluciones tecnológicas modernas que pueden transformar tu casa en un espacio más eficiente, conectado y listo para enfrentar el calor.

• Limpia o reemplaza los filtros: ¡Esto es lo más importante! Un filtro sucio es como intentar respirar con la nariz tapada. Revisa tus filtros cada mes y límpialos o cámbialos si están sucios. ¡Tu aire te lo agradecerá con un mejor rendimiento y aire más limpio!

• Ajusta tu termostato: Cada grado que bajes la temperatura, más energía consume. Intenta mantener tu casa a una temperatura cómoda, por ejemplo, 20-22°C. Cuando no estés en casa, puedes subirlo un poco más.

• Sella las fugas: Revisa ventanas y puertas. Si hay rendijas, el aire fresco se escapa y el aire caliente entra. Usa protecciones y selladores para atrapar ese aire frío donde debe estar: ¡dentro de tu casa!

• Usa tus cortinas: Durante las horas de más sol, cierra cortinas o persianas. Esto bloquea el calor del sol y ayuda a tu aire acondicionado a no trabajar tan duro.

• Limpieza básica de la unidad exterior: Asegúrate de que la unidad exterior del aire acondicionado en tu casa esté libre de hojas, ramas o cualquier obstrucción. Un flujo de aire adecuado es clave para su eficiencia.

• Considera un sistema HVAC de alta eficiencia: Si tu equipo tiene más de 10 años, puede estar consumiendo hasta el doble de energía que uno moderno, por lo que, tal vez, sea momento de pensar en uno nuevo. Los modelos actuales están diseñados para consumir menos energía mientras enfrían más rápido. Fíjate en las etiquetas de eficiencia energética (como el SEER o el EER) al elegir uno nuevo.

• Usa tecnología que enfría con inteligencia: ¿Te imaginas poder prender el aire antes de llegar a casa desde tu celular? ¡Ahora es posible! Los termostatos inteligentes aprenden tus hábitos, ajustan la temperatura automáticamente y te permiten controlar tu clima desde donde estés. Esto significa menos energía desperdiciada y más confort justo cuando lo necesitas.

¡Un verano fresco y sustentable te espera!

Siguiendo estos sencillos pasos y considerando las maravillas de la tecnología moderna, podrás disfrutar de un verano increíblemente fresco, hacer un uso inteligente del aire acondicionado para ahorrar energía y, al mismo tiempo, contribuir a un futuro más sustentable.

Así que, ¡manos a la obra! Prepara tu aire acondicionado, abre las puertas a la tecnología y alístate para disfrutar del verano más fresco y eficiente que hayas tenido. ¡Tu hogar y tu bolsillo te lo agradecerán! Y recuerda, si necesitas ayuda con instalaciones más complejas o la integración de sistemas avanzados, ¡acércate con un experto que podrá ayudarte a hacer de tu hogar el lugar perfecto!